Intento de continuar analizando la realidad sin ilusiones vanas, triunfalismos voluntaristas y claudicaciones políticas

Intento de continuar analizando la realidad sin ilusiones vanas, triunfalismos voluntaristas y claudicaciones políticas

Tercer dogma a superar, por falso y peligroso, el de que España es un mal absoluto, que ni se debe nombrar como tal, sino decir, tergiversando conceptos y lenguaje, Estado español, y defender al mismo tiempo el “dret a decidir”, milonga verbal para evitar hablar del derecho de autodeterminación, que aquí nunca tuvo ni tiene sentido, ya que no hay ni colonias ni opresión, salvo la opresión de clase que padecen todos los españoles, vivan donde vivan, ejercida por los poderes económicos y políticos alrededor del gobierno del PP, a veces del PSOE, en pacto ambos con CiU, CDC o PDeCat y aliados que, en Catalunya, han sido la vanguardia española de todas las privatizaciones en educación, sanidad, empresas públicas, y de los más duros recortes sociales, lo cual ha generado gravísimos problemas sociales que los nazional-secesionistas dicen que solucionarán con la independencia y un amplio sector de la sociedad de Catalunya se lo cree.

Se debe acabar el ser subsidiarios del nacionalismo, citando y manoseando muchas veces textos de diosas y tribunos que no tienen nada que ver con la realidad histórica, y mucho menos con la actual.

La República (27.04.2017)