Ni en la peor de nuestras pesadillas más horribles

Ni en la peor de nuestras pesadillas más horribles

[Crónicas sabatinas] ¡Contra el desgarro, contra los líos y los líantes aprovechados! ¡Por el apoyo mutuo!

[“La expresión “Cataluña un solo un pueblo” la fraguó el PSUC en los años 60-70’s para no dividir la sociedad
catalana entre migrantes y catalanoparlantes y evitar una fractura identitaria de la clase obrera, que es
precisamente lo que ha provocado el procés”.
De ahí, por tanto, que la expresión “un solo pueblo” -falsa a todas luces actualmente desde un punto de vista no
cegado que aspire a tocar realidad y no a encubrirla- juega hoy un papel muy distinto del que tuvo hace años: de
unirnos, de unir a las clases trabajadoras de aquí o de allá, ha pasado a ser consigna de parte y de destrucción del
demos común, además de generar lejanía y separación entre las clases trabajadoras de Cataluña y del conjunto de
España. Pero para el nacional-secesionismo, aunque nos cueste aceptarlo, todo vale. Nada importa aparte de la
Patria, su Patria; la “terra”, su terra; y la construcción y agitación de una ficticia, uniformista y excluyente
identidad catalana, la suya, la única que merece consideración. Las restantes no valen, no son de “pata negra”, o
más incluso: son anticatalanas].

Rebelión (29.09.2018)