Para Colau fue “un día triste”, reconoció en su intervención. Ha tenido que aceptar unos votos que hieren su orgullo izquierdista, la alejan mucho del independentismo y sitúan a ERC en una línea de oposición dura. En adelante querrá hacerse perdonar y por eso anunció su deseo de volver a poner el lazo amarillo e hizo alusiones a los presos y “exiliados”.
20minutos (17.06.2019)