El Teatro del Barrio que honra su profesión

El Teatro del Barrio que honra su profesión

Cuando la jueza María Servini admitió la querella y comenzó a actuar se encontró con la negativa absoluta a cooperar de la justicia española. Sería farragoso reproducir aquí las resoluciones de las sucesivas instancias judiciales repitiendo que el denunciado no había cometido el delito de genocidio, ya que no se trataba de eliminar a ningún grupo de personas ni sector social por su etnia o raza. No se mencionó por su adscripción ideológica o política. Que tampoco se podían ya perseguir los delitos cometidos antes de 1977, en que se aprobó la Ley de Amnistía, que olvidaba para siempre los crímenes de la dictadura.

Diario 16 (28.03.2022)