Europa, sesenta años después

Europa, sesenta años después

Después de 60 años, la Unión Europea es un proyecto fallido. Sea cual sea el aspecto que se considere, presenta toda clase de grietas e ingentes contradicciones. La fuga al extranjero de algunos golpistas catalanes ha dejado al descubierto las lacras de la euroorden, y ha evidenciado hasta qué punto se está lejos de la integración que proclama el discurso oficial (ver mi artículo del 12 de abril pasado). Es cierto que los fugados han sabido escoger los países que podían ser más proclives a sus intereses, pero la desconfianza con la que se mueven ciertos jueces indica bien a las claras que en Europa continúan existiendo los complejos y los perjuicios que tradicionalmente han separado a los Estados. No es extraño que el euroescepticismo se extienda en todas las latitudes, y no puede cogernos por sorpresa que en un país como Italia haya triunfado en las últimas elecciones.

República (24.05.2018)