Archivado con la Etiqueta: Salvador López Arnal

Apuntes sobre documentales (y una aproximación de interés al régimen político pujolista)

Apuntes sobre documentales (y una aproximación de interés al régimen político pujolista)

[Crónicas sabatinas] Más acá y por debajo del secesionismo excluyente y de sistemas afines y de la identidad étnico-nacionalista sobrecargada

Nombrándolo director de TV-3, Pujol compró el silencio de Quintà y, por el mismo precio, adquirió un ogro a su servicio. Ahora, los que durante años hicieron del pujolismo su unidad de destino se preguntan cómo puede ser que todo esto no lo denunciara nadie.

Rebelión (21.1.2017)

Nueve palabras

Nueve palabras

[Crónicas sabatinas] Más acá y por debajo del nacionalismo, la identidad étnica sobrecargada, el soberanismo patrio y el secesionismo excluyente

No deja de ser curioso, como me comentaba no hace mucho el amigo historiador Jordi Torrent Bestit, la importancia que algunos sectores de izquierda conceden a los liderazgos cuando precisamente esa misma izquierda ha discutido hasta el hartazgo, una y mil veces más, la necesidad de superarlos, de ir más allá de la figura del gran líder, del gran dirigente, del Secretario General (todo con mayúsculas) indiscutible y omnisciente, de las “élites políticas” internas que por labia, preparación y figura dirigen y hegemonizan colectivos más o menos serviles.

Rebelión (14.01.2017)

Un regalo republicano y federalista

Un regalo republicano y federalista

[Crónicas sabatinas] Más acá y por debajo del nacionalismo, la identidad étnica sobrecargada, el soberanismo ganancial, el esteladismo y el secesionismo excluyente

¿Por qué tengo que ser diferente… a un obrero andaluz, vasco, extremeño, etc…; a un enfermo mallorquín, canario, valenciano, etc…; a un estudiante asturiano, gallego, murciano, etc…; a un jubilado madrileño, ceutí, santanderino, etc? ¡No quiero ser diferente!

Rebelión (7.01.2017)

I nosaltres, què volem (queremos) realment?

I nosaltres, què volem (queremos) realment?

[Crónicas sabatinas] Más acá y por debajo del nacionalismo, soberanismo y secesionismo excluyente

Estamos, por supuesto, más cerca de millones de ciudadanos de todos los confines de España, de Portugal y de los restantes países del mundo, que de gentes, poderosas y enriquecidas gentes, que viven en .Cat, cuya marca de identidad básica es, ante y sobre todo, el poder, la riqueza, el dominio, los suyos, el etnicismo idenditario (cuando conviene). Algunos de ellos, chorizos y manipuladores confesos. Su único color, su símbolo más básico, es el color del dinero. Ni el rojo ni el amarillo ni el morado. Son los mismos que desde hace algunos años, esta es su estrategia actual, intentan levantar muros de incomprensión entre pueblos y ciudadanos con mucho pasado en común, en muchos momentos admirable e incluso heroico. Y con la colaboración, incomprensible, de fuerzas que se dicen populares.

Rebelión (31.12.2016)

Lenguaje, falsedad y secesión

Lenguaje, falsedad y secesión

[Crónicas sabatinas] Más acá y por debajo del nacionalismo, soberanismo y secesionismo excluyente

Sobre el apoyo a las acciones y estrategias secesionistas de la segunda autoridad de Cataluña, la señora Forcadell, conviene recordar que la ex presidente de la ANC, una política profesional de ambición ilimitada, ha hecho todo lo posible hasta el momento, y sin descanso, para crear y abonar una línea de demarcación excluyente y de máxima incomprensión mutua entre la ciudadanía de Cataluña (una parte, “su pueblo nacionalista”) y la del resto de España, una “autoridad” que ha sido capaz de decir en el ágora pública sin enrojecer ni pedir disculpas que los catalanes éramos esclavos de los españoles, alguien que ha hablado de España como un país de zafios y reaccionarios sin matiz alguno, alguien que ha expulsado por su boca toneladas de odio y vómitos sobre todo “lo español”, alguien que, por supuesto, nunca ha tenido problema alguno en asociarse en un frente único nacional y nacionalista (són els seus!) con gentes de la “altura” poliética de Jordi Pujol y sus próximos (aquests són de la casa; los otros, sin distinción, son unos pitufos traidores, unos enemigos de la Patria, “unos esclavistas” con ADN imperial).

¿Qué se nos dijo hace unos cinco o seis años? Que la cosa iba del dret de decidir. ¿Qué dret es ese preguntamos? Un dret que tienen todos los pueblos del mundo se nos respondió y luego se nos invitaba a ir a manifestaciones no nacionalistas, eso nos decían, estrictamente democráticas. Democracia es votar, se añadía, y nosotros no podemos votar, repetían. Algunos, incluso, fueron a rodear La Caixa, a ello nos convocaban, para demostrar, mostrar o construir una punta anticapitalista en el movimiento. La ingenuidad, demostrado está, no tiene límites. Muchos cayeron en la trampa.

Rebelión (24.12.2016)

Para avanzar en la construcción de una democracia humanista, social y crítica

Para avanzar en la construcción de una democracia humanista, social y crítica

Reseña de Jordi Mir Garcia, 5 años del 15M. Movimientos sociales. Construyendo democracia, Vilassar (Barcelona), El Viejo Topo, 2016

La observación: al hablar de legitimidades y legalidades nos encontramos, apunta JMG, que la idea de la desobediencia civil no violenta ha desbordado los espacios autopresentados como de orden y nos encontramos a todo un presidente (profundamente neoliberal) de la Generalitat (el hijo político de Jordi Pujol, el que se rió en sede parlamentaria de la forma de hablar castellano de los niños andaluces y gallegos) que la plantea “como una posibilidad aunque finalmente opte por la astucia”. Cita entonces JMG unas palabras de Mas -“La tarea de los buenos políticos es soldar la legitimidad con la legalidad”- y comenta que quizá haya sido una de las frases más brillantes “del presidente Mas en el debate de política general”. Lo serían si el que decidió ir agazapado en la candidatura “Junts pel sí”, el preferido de doña Marta, tuviera la bondad machadiana-brechtiana del profesor-precario de la UPF. Pero no es el caso, desde luego que no es el caso: la legitimidad a la que alude el amigo de Oriol Pujol no es legítima propiamente y la legalidad es entendida por él de forma meramente instrumental, retorciéndola hasta la inversión, siempre y cuando la situación lo requiera. en beneficio suyo, de su grupo político, de la “gran causa” y de los intereses de las 400 familias con mando en plaza a las que aspira y pretende representar.

Rebelión (22.12.2016)

Una reflexión federalista (y antinacionalista) de Ricardo Rodríguez

Una reflexión federalista (y antinacionalista) de Ricardo Rodríguez

[Crónicas sabatinas] Más acá y por debajo del nacionalismo, soberanismo y secesionismo excluyente

“Quienes se envuelven a todas horas con la bandera del españolismo se parecen de forma asombrosa a quienes se envuelven a todas horas con la bandera del nacionalismo-secesionismo, por poner un ejemplo, transpiran la misma intransigencia, el mismo odio, la misma incomprensión de quienes, quizá, simplemente están manifestando otra manera de sentirse catalán o español o vasco o de Villanueva del Pardillo”

Rebelión (17.12.2016)

Las tesis del PSUC sobre el tema-monotema y la realidad (real) de EUiA

Las tesis del PSUC sobre el tema-monotema y la realidad (real) de EUiA

[Crónicas sabatinas] Más acá y por debajo del nacionalismo, soberanismo y secesionismo excluyente

“Todos los estados son artificiales y ninguna nación es producto de la naturaleza. Sólo cabe buscar equilibrios que faciliten al máximo la convivencia entre grupos humanos culturalmente heterogéneos cuya propia diversidad, para ser sostenible, exige un mínimo de unidad política. Fuera de las selvas amazónicas y algunos otros hábitats anclados en los márgenes de la historia, no existen naciones étnicas, sólo naciones políticas.”

Rebelión (10.12.2016)

Matices a un manifiesto republicano de ocho puntos para el día de la Constitución

Matices a un manifiesto republicano de ocho puntos para el día de la Constitución

La conquista de la tercera República exige generar y abonar cultura federalista. Lo contrario, precisamente lo contrario, de lo que vienen haciendo las fuerzas nacionalistas, de aquí y de allá, “los hunos y los hotros”, que ponen en primer lugar una real-inventada identidad nacional por encima de cualquier otra consideración de proximidad. Han llegado a afirmar que nuestros ADNs culturales son opuestos y casi contradictorios. Toda una hazaña intelectual.

Rebelión (6.12.2016)

¿Desobedecer? Sobre el 6 y el 8 de diciembre

¿Desobedecer? Sobre el 6 y el 8 de diciembre

[Crónicas sabatinas] Más acá y por debajo del nacionalismo, soberanismo y secesionismo excluyente

¿Hay razones para la desobediencia? Hablando en términos generales, por supuesto. Las hay cuando las leyes chocan o son contradictorias con principios morales (o acuerdos políticos generalizados) fundamentales. ¿Y qué principios son esos? Con vistas a un acuerdo amplio podemos tomar pie en los derechos humanos (los recogidos en la declaración, incluso ampliaciones) y en una interpretación adecuada, no sesgada ni malintencionada, de ese choque u oposición, asunto que, por supuesto, será objeto de discusión y disensiones salvo en casos que se impongan por su evidencia: la persecución o menosprecio de alguien por su lengua, sexo, origen o condición social pongamos por caso.

De este modo, desde esta perspectiva, una razón para la desobediencia el próximo día 6 sería la contraposición (contradicción en términos usuales) de la CE78 con derechos humanos esenciales. Pero, ¿con qué derechos? ¿Con derechos culturales, lingüísticos, nacionales? ¿La Constitución del 78 ataca esos derechos? ¿En qué artículos?

Rebelión (3.12.2016)