El referéndum y la batalla de los relatos
Las jornadas más peligrosas serán las que inmediatamente posteriores al 1-O. Si no ha podido celebrarse el referéndum, la ANC ha manifestado su determinación de que el gobierno catalán proclame unilateralmente la independencia; si puede celebrarse y si como está previsto gana el Sí por amplia mayoría y baja participación, se proclamaría la independencia a las 48 horas de escrutado el resultado.
Ello obligaría al gobierno español a tomar medidas contundentes, sin descartar la aplicación de la Ley de Seguridad Nacional, que desarrolla el artículo 116 de la Constitución y regula los estados de alama, sitio o excepción, pues el artículo 155 que contempla la reversión de las competencias autonómicas se habría quedado pequeño. Las recientes declaraciones de Mariano Rajoy en Barcelona, donde afirmó que “nos obligarán a hacer lo que no queremos”, apuntan en esta dirección. Un escenario donde sería casi imparable el estallido de la violencia.
Si, a pesar de todo, no se produjese esta situación las grandes heridas abiertas en la sociedad catalana tardarán años en cauterizar.
Crónica Popular (29.09.2017)