De la izquierda de antaño pocas trazas quedan. Ocasionalmente da señales de vida, pero será difícil que se recomponga y abandone su extravío. Sin embargo, ha habido en tiempos no lejanos momentos en que se pensó que se podían asaltar los cielos, y quizá faltó poco para ello. De ello, y de la perspectiva de reiniciar la lucha es de lo que trata esta conversación.
El Viejo Topo (1.06.2024)