El marxismo (afortunadamente) carece de “axiomas científicos iniciales” (I)
En el marxismo, incluidas desde luego sus aportaciones científicas, nada debería considerado indiscutible, “para siempre”, o evidente por sí mismo. Todo debería ser objeto de discusión ininterrumpida, sin paralizarnos por ello. Sus prácticas, sus afirmaciones políticas, sus reflexiones filosóficas, sus decisiones, sus ideas y conceptos científicos, su historia, sus meteduras de pata, etc.. A excepción de su lucha contra el mal social (en sus diversas dimensiones) y su aspiración a una sociedad justa, de iguales, no violenta, pacífica, nada masculinizada, austera y en armonía con la Naturaleza.
Rebelión (31.01.2020)