La sombría reacción identitaria
La alternativa de emancipación a las consecuencias del capitalismo financiero y tecnológico no es el regreso identitario ni las coaliciones transversales ‘antiliberales’ en torno a ideas reaccionarias
Ahora que tanto se habla de libertad, convendría tomarse en serio las implicaciones de esa hermosa palabra en un contexto socioeconómico tan complicado como el presente. ¿Acaso alguien piensa que somos igualmente libres? Parece claro que carecemos de libertad para desarrollar nuestras vidas si estamos sometidos a poderes arbitrarios: el origen social y familiar que determina desigualdades de partida y nos condiciona de manera sustancial, la necesidad extrema, la pobreza, la precariedad, los estragos de una economía uberizada o los recortes sociales que lastran las posibilidades de los que menos tienen. Como recordaba Sancho Panza, «dos linajes solos hay en el mundo, que son el tener y el no tener». Cualquier proyecto realmente comprometido con la emancipación del ser humano debe articularse contra la tiranía de los orígenes, la que cronifica esos dos linajes y sepulta la verdadera libertad de los seres humanos.